Flor otoñal del cólquico, hierba de la familia de las liláceas
Las flores son de color lila, con forma de embudo y seis lóbulos puntiagudos. El fruto tiene forma de cápsula oval acabada en punta. Las semillas tienen una parte gelatinosa con la que se pegan a las patas de los animales para ser diseminadas. De los estambres se obtiene un tinte y un aroma sucedáneo del azafrán. El bulbo contiene varios alcaloides, como la colchicina, que es venenosa y se utilizaba antaño para tratar lo ataques de gota. A pesar de su nombre y del parecido de las flores, el cólquico no tiene nada que ver con el azafrán.
Especies y variedades:
Colchicum autumnale ‘Roseum plenum’, de flores dobles de color rosa.
Colchicum speciosum, el azafrán de los prados, con grandes flores malvas de hasta 20 cm.
Flores del cólquico, parecidas a las del azafrán, pero que son venenosas
Originario: de Europa.
Situación: al sol o a media sombra. En suelos ricos en materia orgánica, con un buen drenaje. Naturalizada en praderas y zonas pantanosas.
Cultivo: los cólquicos se plantan a principios del verano, a 10 cm. de profundidad, con una separación entre las plantas de 20 cm.
Multiplicación: separando las matas en el verano.
Problemas: cuidado con el cólquico porque es una planta tóxica.