El beleño es una herbácea bastante interesante que pertenece a la familia
de las Solanáceas. Es por lo tanto pariente de algunas plantas tan útiles
como el tomate, la patata y la berenjena y también de otras plantas mucho
más peligrosas, como la belladona o el estramonio. Veremos crecer al beleño
humildemente en suelos arenosos, los descampados, en las cunetas de las
carreteras y en otros terrenos yermos. Pero cuidado con él, porque contiene
diversos alcaloides que pueden resultar un peligro ya que son muy venenosos.
Hay quien dice de él que hasta el simple olor de sus flores puede causar
vértigo. Gracias a aquellas sustancias y en las dosis adecuadas el beleño
se ha utilizado para calmar los dolores de muelas e incluso como anestésico
desde épocas tan remotas como la Edad Media.
La flores del beleño tienen forma de tubo, con un color ocre amarillento
Las flores también estan recorridas por venillas de color purpura y tienen
el fondo del tubo más oscuro
Florece durante el verano, más o menos entre los meses de junio y septiembre
El beleño negro crece en terrenos arenosos y más bien baldios, siendo
hoy en día bastante escaso en nuestro campos
Las hojas son alternas, con grandes dientes y acabadas en punta
El beleño tarda dos años en madurar, desarrollando el primer año solo
unas hojas en forma de roseta y en el segundo éstas se secan y emite el
tallo con las flores